
Queso Camerano: versos, trueque y trashumancia
El Queso Camerano es un producto con una larga tradición en La Rioja que se remonta a los siglos XII y XIII. Te contamos algunos de los momentos que han marcado la historia de este producto.
El Queso Camerano está en nuestros tapeos, nuestras salidas “de pinchos”, en nuestras celebraciones y también en nuestra cocina y nuestro día a día. Es uno de los productos más apreciados de nuestra gastronomía. Pero detrás de este alimento, que cuenta con el distintivo de DOP desde 2009, hay una gran historia muy vinculada a la vida, cultura y costumbres de la Sierra en la que se elabora.
El Queso Camerano se presentó la pasada semana en FITUR. Allí, el presidente de la DOP, Javier Martínez, dirigió una cata de distintas variedades de este producto y habló de algunos de los hitos que han marcado su historia:
- El Queso Camerano, en los versos de Gonzalo de Berceo. Entre el siglo XII y XIII el poeta riojano ya lo cita al describir la vida de San Millán de la Cogolla, lo que revela la gran tradición de este producto.
- El Queso Camerano es la DOP de queso de cabra situada más al norte de España. Un dato que no es casual, sino que está ligado a la trashumancia, con ovejas que iban de la meseta a las montañas del Sistema Ibérico según el momento del año. Los pastores llevaban para su consumo leche de cabra, más digestiva que la de oveja. Así, las cabras comenzaron a quedarse en la Sierra de Cameros.
- Este queso, por su alta demanda, fue durante mucho tiempo uno de los principales productos de intercambio o trueque en el mercado del Valle del Ebro. Hasta allí lo llevaban los conocidos como “hueveros” o “cabriteros”.
- En ese momento en la Sierra de Cameros, se producía sobre todo queso fresco. Los quesos que no se vendían o no se utilizaban como trueque, volvían a la Sierra y se transformaban en semicurados y curados. De ahí que ahora la DOP ampara estas variedades, manteniendo la tradición.
- Actualmente la DOP Queso Camerano, que prevé elaborar este año 45.000 kilos de producto, agrupa a 3 queserías y 10 ganaderías, repartidas en el valle del Ebro y la Sierra de Cameros.