Jueves lardero, una tradición medieval
La costumbre de merendar chorizo el jueves anterior al Carnaval (este año el 4 de febrero) tiene su origen en la Edad Media, cuando la norma católica imponía la prohibición de la carne durante la Cuaresma.
En la época medieval, la Iglesia Católica prohibía a sus fieles comer carne durante la Cuaresma. A excepción de unos pocos privilegiados que conseguían (compraban) una bula o permiso de la Iglesia para comer lo que quisieran, el resto de los mortales estaba obligado a renunciar a la carne y el vino, e incluso a los huevos, la leche y el queso (por proceder de la carne) si se quería alcanzar la máxima virtud. De hecho, el nombre mismo del periodo previo a la Cuaresma, el Carnaval, carne-levare (quitar la carne) hace referencia a esta restricción alimentaria.
Antes del ayuno, eso sí, los cristianos se despedían de los manjares prohibidos degustando los productos obtenidos de la matanza. ‘Jueves lardero, longaniza en el puchero’, reza el refrán. Aunque en La Rioja sería más adecuado el dicho de ‘Jueves lardero, chorizo, pan y huevo’, ya que estos tres ingredientes son los que han permanecido hasta la actualidad, junto a la costumbre de disfrutarlos en grupo y al aire libre.
Entre los municipios que mantienen viva esa antigua fiesta en La Rioja, que este año cae el 4 de febrero, está, como es natural, Lardero, cuyo nombre procede de lardarius, tocinero, por sus reconocidos embutidos y salazones. En la actualidad el municipio organiza actividades lúdicas para conmemorar esta fecha, y ofrece degustaciones de chorizo al sarmiento y de caldo.
Pero también se celebra en la capital y en otras localidades como Alfaro, Santurde, Santurdejo, Cenicero. La fiesta, en Logroño, llega de la mano de la Asociación Amigos del Plus Ultra y de la Universidad Popular, entidades que invitan a todo el mundo a bollos con chorizo.
El bollo preñao y la tortilla de chorizo son las formas más típicas de combinar el huevo y el embutido. Pero en Alfaro, además, tienen una receta especial para la ocasión: la culeca, un tipo de empanada individual rellena de huevo duro y chorizo. Los lugareños las disfrutan junto en el campo, en la zona de La Plana.
En Santurde y en Santurdejo, los jóvenes del pueblo organizan también una merienda a base de huevos y chorizo, productos que consiguen pidiendo de casa en casa a cambio de canciones, mientras pasean el Judas, un muñeco de paja que acaba avivando la hoguera para el asado.
Algo más completa es la empanada tradicional del Jueves de Chivas en Cenicero, que la Asociación Amigos de Cenicero reparte entre los vecinos siguiendo una vieja tradición de los panaderos locales. La masa se rellena de chorizo, huevos, pimientos y panceta, y se suele tomar con vino y zurracapote.
